domingo, 20 de diciembre de 2015

Alfaro Ucero en un lugar de la mancha


El nuevo diagrama político proyectado para el punto cíclico que abrimos luego del triunfo electoral de la unidad democrática, nos acerca al país nuestro, con una convicción más razonable, respecto a la idea de que habitamos un contexto patrio, republicano, y/o geográfico, incluso, más real; o visto en contraposición: menos comiquita, pandemonium bizarro, surrealismo mágico.

El patrimonio "pata en el suelo", o dominante porcentaje de pobreza, siempre por encima de la media, ya no es para honor de las certezas anheladas en aras del buen juicio, un bloque de fanáticos apelmazados en la balanza; una plataforma de incondicionales extendida bajo un discurso, a lo largo de largas avenidas donde rebosan en la óptica de binoculares henchidos como cerdos americanos, por el gozo de no atraparlas enteras; por la lujuria de que en un punto se diluyan, se difuminen como hormigas. cada vez más diminutas, y en definitiva se esfumen, desaparezcan en la reverberación soleada de la distancia; por el solaz de hallarse circunscritos por fuerza de multitudinario apoyo, a escenarios felices de comodidad; sentirse atornillado en el poder por una mano descomunal, fuerte, definitiva.

El lugarcomún de la desacralización, requerida porque nos hallamos de pronto, mortales, hijos o nietos de María pueblo, de Juan el del barrio, o de Pedrito de los Palotes; afectados de intelectualidad por rabiosa lectura, pero víctimas "gracias a Dios" de aquello que nos mancha el paltó, en ocasiones, con el estigma de la exigua gnosis frente a la inconmensurable cosmogonía de la estrategia divina, providencial; el platanazo por altura, sin paracaídas u otros artilugios de protección; que no puede desfigurar un gesto soberbio, un misil argumentativo de subestimación; y menos aún, un revanchismo perverso de muchachito malcriado, que ni el pollo ronco aquel de "devuélveme mis peroles": como quisiste cambiar tu terrible situación, "devuélveme mis peroles, devuélveme mi reloj, devuélveme aquella foto donde salimos los dos" (Serenata).

Parece una indefectible condición, un distintivo constante en las derrotas, el pataleo de ahogado; la supresión gentil de la respuesta humilde cuando la suerte o la lógica nos son adversas, y carecemos por supuesto, de hidalguía, del guáramo gallardo por parte de nuestro ser excelso; cuánta falta hace, en ocasiones, en quienes llamaron por las paredes ennegrecidas de aerosoles, a defender el legado del supremo, el llamado humilde pero noble, a "deponer las armas, por ahora, porque los objetivos no fueron logrados", frente al dedo en el cuello de Oblitas, y la declaración firme de Lucena, la irreversibilidad del 6D; gracias a la cual una amplia mayoría amaneció de democracia en la Asamblea, y se materializó en parte el sueño que forjó el pueblo para que el país empiece a ser de todos; y nos sentimos, en alfaroucereana embriaguez, guapos y apoyados por todo el cañón, para celebrar la robustez de las posibilidades que resurgieron, bien apadrinadas, en estas recientes votaciones.

Querido Sancho, los perros siempre ladrarán en algún lugar de la mancha, porque hueso de costilla asada es muy sabroso cuando no hay nadie que lo arrebate, sobre todo si el arrebatón viene refrendado, como reivindicación venturosa de navidad en víspera, por altas jerarquías militares, honrando una institución que nunca debe abstraerse de su prosapia heroica, valiente, bolivariana.

No obstante, también se quiere pasar como lugarcomún la vertical intervención del General Vladimir Padrino López, de acuerdo a las versiones que lo involucran en anécdotas sobre la jornada electoral, para que el resultado que surgió en la mesa rectoral fuese respetado; "deber ser" que no debe constituir sino una regla a defender en todo momento a capa y espada, sin atender a demandas de los privilegios que se exponen, a bosal de arepa, prebendas u otros.

Nada más natural que el baile zumbaíto de Allup, feliz por los resultados, la euforia de Lilian Tintori y otros líderes; las expectativas, también, de quienes determinarán el rumbo que asuman los nuevos diputados, con las tensiones a manifestarse de cara a la selección del presidente de la Asamblea, u otros eventos donde los acuerdos no vienen dados por un sabelotodo individualista y megalómano al que nadie puede proponer un argumento diferente.

Más allá de lo que de éxito se pueda augurar a Borges, Torrealba, María Corina, Leopoldo, Capriles, Mitzi, Ledezma, y todos los que se fajaron por los sueños para llevar adelante esta esperanza; más allá del triunfo que se le pretende esquilmar mezquinamente al pueblo que votó por un cambio, envío desde aquí -independientemente de que esté saludando un deber cumplido-, mi humilde orgullo "venezolanista", patrio; mi satisfacción civil, por el gran desempeño que nos ha brindado el glorioso Ejército Nacional, las Fuerzas Armadas Nacionales.

Ninguna persona es perfecta, y por tanto ninguna institución, pero hay en cada uno como individuo, o como parte de colectivos, ciertas facetas de perfección, y es el momento en que hacemos lo correcto; cuando sin que nos tiemble el pulso, dejamos de lado la gama de oportunidades que nos invitan a decidir de acuerdo a intereses personalistas, y optamos, elevándonos espiritualmente, por darle valor al libro de nosotros todos, hermanados por deberes y derechos de justicia: la Constitución Nacional de la Republica Bolivariana de Venezuela.


















 
Free counter and web stats